La Vanessa de Los Cardos vuelve a inundar la isla
Vientos flojos del este provocan una nueva explosión de color con esta mariposa
Las condiciones climatológicas, un tanto atípicas estos últimos días de octubre, con vientos flojos del este han vuelto a traer por miles a la mariposa llamada Vanessa de Los Cardos. En estas últimas horas hemos visto por toda la isla como la población se ha multiplicado.
Las vemos en los jardines, en los campos, pero sobre todo nos cruzaremos con muchas de ellas en las carreteras, que es donde mayores tasas de mortalidad se producen cuando llegan con este número.
La Vanesa de Los Cardos, es una mariposa que habita en buena parte del planeta, excepto Sudamérica. Se identifica fácilmente por ser de mediano tamaño y poseer una amplia de paleta de colores en sus alas, desde el negro al blanco, pasando por el beige, naranja, rojizo y varios tonos de marrón.
El tiempo en los próximos días
Durante casi toda la semana que viene tendremos vientos flojos del este con temperaturas rozando los 30 grados en algunas zonas, hasta el miércoles, que será cuando los vientos de componente norte-noreste empiecen a soplar con algo más de fuerza, lo que traerá un descenso de las temperaturas. Durante los próximos tres días seguiremos viendo muchos ejemplares de este bello lepidóptero.
Frenético recorrido
Las recientes investigaciones sobre los pasos de este aparente débil insecto demuestran que las Vanesas de los Cardos que se observan con normalidad en los jardines en Europa en primavera y verano puede llegar hasta la sabana tropical africana, es decir, hacen un viaje de 4.000 kilómetros. Es en este viaje, cuando en condiciones de poco viento, o vientos del este acaban en las islas Canarias muchos de los ejemplares.
El periplo de esta especie se inicia a principios de primavera y culmina en otoño. El viaje de ida se realiza en dos etapas. En la primera colonizan amplias regiones de la cuenca mediterránea, y en la segunda, de carácter estival, la descendencia de esta primera oleada se expande por las tierras del centro y del norte de Europa, donde permanece mientras duran las buenas condiciones meteorológicas.
A finales de verano y durante el otoño, unas nuevas generaciones inician el camino de regreso a África, hasta las fértiles tierras del Sahel, que tras la época de lluvias se constituyen en lugares idóneos para la reproducción de la especie. Finalmente, más avanzado el invierno, se concentrarán sobre todo en las Islas Canarias y al sur del Magreb antes de iniciar un nuevo ciclo migratorio. Para poder completar el ciclo son necesarias seis generaciones de mariposas.
Viaje en las alturas
En su largo viaje minimizan el esfuerzo ‘cabalgando’ por las alturas (a unos 200 o 500 m de altitud, a veces incluso por encima de los 1.000 m), a lomos de corrientes de aire atmosférico, que les permiten alcanzar los 40-50 Km/h. En total pueden llegar a recorrer hasta 14.000 kilómetros.