Un 5.1 esta madrugada es el mayor terremoto registrado en la Erupción de La Palma
Nuevos aportes de lava en profundidad indican que la erupción va para largo
La situación del Volcán de Cumbre Vieja ha cambiado drásticamente en los últimos días, el incremento de la actividad sísmica confirma que el proceso eruptivo está en una nueva fase, y además la impresión generalizada de los científicos es que va para rato.
El Instituto Geográfico Nacional (IGN) ha confirmado la presencia de nuevos aportes de magma desde altas profundidades del sistema eruptivo hacia los reservorios intermedios de los que se alimenta el volcán de La Palma. Este incremento del volumen de magma desconcierta a la comunidad científica, en medio de lo que parecía un descenso de actividad.
El IGN ha revisado al alza el terremoto localizado a la 1.08 horas de este viernes en Mazo, de forma que de 5 ha pasado a magnitud 5,1, la más alta desde que el pasado 19 de septiembre se iniciase una erupción volcánica en la isla canaria de La Palma.
El movimiento sísmico de esta noche se produjo a 37 kilómetros de profundidad al suroeste de Mazo, y su intensidad ha sido IV-V en una escala de XII, ha indicado el IGN, el cual ha añadido que este terremoto también se ha sentido en Tenerife, La Gomera y El Hierro.
Más magma en profundidad
La aparición de más magma podría suponer la prolongación en tiempo de la actividad volcánica y, por tanto, una mayor probabilidad de que las emisiones de lava desborden coladas antiguas y generen nuevos daños.
Según explica Itahiza Domínguez, sismólogo del IGN, en el mejor de los escenarios "podríamos estar ante una compensación de material magmático en los reservorios, o ante la aportación de magma directa a la superficie, como parece que es”.
"Lo que creemos es que el magma se ha acumulado durante años a esa profundidad de más de 30 kilómetros, lo que no sabemos es cuánto aporte hay a esa profundidad y si hay más abajo otra conexión que lleve magma hasta ese nivel", aclaró Domínguez.